«Miren, para que los problemas del país se solucionen, lo que hay que hacer es, número uno, identificar los problemas, y número dos, ponerlos en el plan fiscal para asignarle el dinero. Es medio complicado, lo sé, pero para eso me necesitan en el Senado», explicó Rivera Schatz mientras un país estaba eternamente agradecido de tener a este genio en el Senado para que nos pueda decir estas cosas. «No solamente eso, sino que una vez se asigne el dinero para el problema, pues usamos el dinero para solucionar ese problema, que ya sabemos que es importante porque lo identificamos y le dimos prioridad. En verdad, yo no sé qué ustedes se harían sin mí. ¡Esperen a escuchar mis pensamientos sobre cómo se pueden morir si no toman agua todos los días!», exclamó.
Tratando de probar que hemos aprendido de su genio, le preguntamos que si el próximo paso sería entonces contratar a las personas más capaces para meter mano en estas prioridades, lo cual lo hizo explotar en carcajadas y declarar: «¡Qué tontos son! ¡Se contrata a los panitas que pagan mi campaña para que puedan tener el privilegio de mi genio año tras año! ¡A la verdad que no sé cómo se pueden levantar de la cama todas las mañanas y no partirse una pierna sin yo estar ahí!».