San Juan, Puerto Rico – En respuesta a las críticas de líderes feministas sobre el efecto desmantelamiento de la Oficina de la Procuraduría de la Mujer (OPM) al despedirse el 75% de sus empleados, la administración del gobernador Luis Fortuño aseguró que dicho departamento seguirá operando como siempre, sólo que de ahora en adelante sus oficinas estarán centradas «en la cocina de tu casa».


Una empleada de la OPM trabajando arduamente desde su nueva oficina

«¿Qué mejor manera de ahorrar dinero que teniendo un departamento distribuido sin oficinas centrales?», preguntó José Salazar, Director de la Oficina de Presupuesto. «No saben cuántos chavos se ahorrará el Gobierno deshaciéndose del costoso mantenimiento de planta física mudando todas las operaciones de la OPM a la cocina de tu casa. Total, ahí es donde se puede decir que la mujer puertorriqueña verdaderamente florece, demostrando sus tremendas habilidades culinarias… ¡y también demostrando cuán bien cocina!», rio con una guiñada zalamera. La mudanza de la OPM a la cocina de tu casa tiene como fin no sólo disminuir los gastos operacionales del gobierno, sino también «poner a las mujeres que trabajen en dicha oficina en un ambiente en el cual se sientan más cómodas. Es más», añadió Salazar, «si quieren andar todo el día descalzas en la coci– perdón, por las nuevas oficinas de la OPM, pues que se sientan en libertad de hacerlo».


«¿Para qué esta mujer necesita tanto libro?», preguntó Salazar «¡A menos que sea el de Comida Criolla, claro está!»

Amanda Sosa, la persona dentro de la OPM encargada de facilitar esta mudanza, protestó diciendo que no puede creer que la administración de Fortuño «le haya dado un foquetazo tan descarado a la mujer puertorriqueña: ¿no les bastó con avergonzarnos a todas poniendo a Evelyn Vázquez a representarnos como Presidenta de la Comisión de Asuntos de la Mujer en el Senado? ¿Qué es lo próximo? ¿Poner a Maripili a cargo de la Procuraduría de la Mujer?». Salazar, sin embargo, le restó importancia a las quejas de Sosa, preguntándose «si no será que ella cayó mala y por eso anda por ahí de malas pulgas», y reafirmó el inquebrantable compromiso de la administración de Fortuño para con la mujer puertorriqueña, citando como ejemplo los fondos que se asignaron para el programa social llamado: «Cómo Ser Feliz Siendo Madre y Cuidando de tu Marido».


La felicidad de la mujer puertorriqueña comienza con un signo de «+»

«Nosotros queremos que las mujeres puertorriqueñas sean capaces de vivir su vida a plenitud», aseguró Salazar sobriamente, «y que sean libres en nuestra sociedad de procurar todo lo que necesiten: ya sea arroz, carne, vegetales o utensilios de cocina. ¡Todo lo necesario para que sean mujeres productivas!».

Por El Rata